Tokio 2020: un reto para los profesionales del alto rendimiento

Cuenca (Azuay). – A seis meses de inaugurarse la XXXII edición de los Juegos Olímpicos ‘Tokio 2020’, los profesionales del área médica que atienden a los referentes del deporte nacional ejecutan una planificación que les permite atender las necesidades de los deportistas para llegar en óptimas condiciones a la mayor cita multideportiva mundial.

En un diálogo mantenido con el médico deportólogo Marco Chango, coordinador nacional de los equipos multidisciplinarios de alto rendimiento, conocimos sobre el trabajo que se desarrolla a nivel nacional, en conjunto con los profesionales de esta Cartera de Estado.

-¿Cuáles han sido los aportes que los equipos multidisciplinarios han realizado para el desarrollo deportivo del país?

Este es el tercer año que comandamos los equipos multidisciplinarios del alto rendimiento, nuestra primera carta de presentación es la creación de los ‘Planes Profilácticos Proactivos’, que consisten en que todas las áreas –medicina deportiva, clínica, nutrición, psicología, biomecánica y fisioterapia- en conjunto con el entrenador y el atleta abordan la recuperación del deportista, no el tratamiento de la lesión.

-¿Estos planes se enfocan a su recuperación?

 Nosotros vamos muchos pasos atrás y trabajamos en la recuperación psicológica, fisiológica, mental, neurológica y bioquímica del atleta durante el entrenamiento. De esa manera nosotros controlamos el proceso de adaptación que ellos tienen ante la carga (de entrenamiento) y ante la respuesta de su organismo, nosotros actuamos como equipo para que el deportista se adapte, recupere y pueda recibir una nueva carga lo más pronto posible.

-¿El trabajo de sus profesionales es integral, no solo físico?

Nosotros buscamos la prevención de lesiones, pero sobre todo la salud mental y física de ellos. Lo importante es que estén íntegramente preparados para afrontar ese reto que es Tokio 2020, porque la mayoría de veces, los deportistas a puertas de las olimpiadas llegan lesionados.

-¿Cómo inicia su trabajo en este año olímpico?

Nosotros iniciamos con la valoración química, actualización de las historias clínicas que están preparándose para Juegos Olímpicos: antecedentes patológicos, control de inmunizaciones, de alergias, problemas ortopédicos, ahora estamos realizando unas evaluaciones cardiológicas, electrocardiogramas, espirometrías (conocer la ventilación pulmonar) y ecocardiogramas a todos los atletas que están apuntando para Tokio.

Estos resultados son de suma importancia, porque de ahí se tendrán las bases para hacer las comparativas en caso de sobre carga y sobre entrenamiento que ellos puedan tener.

-¿Cada área tiene definida su planificación para estos últimos 6 meses?

En el control nutricional estamos realizando las cineantropometrías (medición de la composición corporal humana en función de los cambios en los estilos de vida, la nutrición y los niveles de actividad), para saber cuánto musculo tienen, cual es el ideal de grasa para Juegos Olímpicos. Normalmente los corredores y marchistas que -son nuestros fuertes (en Cuenca)- tendrán que llegar a parámetros entre nueve y ocho por ciento (9 – 8%) de grasa en varones y nueve y diez por ciento en mujeres, con un porcentaje de musculatura cercano al 50 por ciento.

-¿Este trabajo se replica a nivel nacional en todos los centros?

Nosotros tenemos un exhaustivo control y un seguimiento total del proceso que tienen todos los atletas de alto rendimiento ecuatoriano ante la carga (de entrenamiento), tanto, de los que se preparan en el país, como los que residen o pasan la mayor parte del tiempo en el extranjero.  En este caso, apenas ellos pisan el Ecuador, los evaluamos, tenemos los ‘test’ y las evaluaciones técnicas que se realizan en el exterior, integrando toda esa información.

-¿Su visión va de la mano con la gestión de la Secretaría del Deporte?

El éxito de este Plan de Alto Rendimiento es que existe un departamento técnico metodológico de la Secretaría, en dónde se distribuyen varios técnicos por grupos de deportes para realizar seguimiento permanente. Nosotros tenemos contacto con ellos y conocemos de antemano la situación de cada deportista, ya que nos refieren las molestias y nosotros actuamos rápidamente.

-Tras las clasificaciones que se den en los próximos meses, los deportistas en su mayoría buscarán concentrados fuera del país. ¿Cómo trabajaran en ellos?

Nosotros ya tenemos nuestro plan estratégico para el seguimiento de los atletas. Hay un interesante rubro que ha ingresado para el control bioquímico, en entrenamiento desde ya estamos revisando los niveles de urea, enzimas, de CK (creatinquinasa), (…) en todos los deportistas.

Adicional, estamos con un plan de adaptación al calor y a la humedad, la parte económica ya está resuelta, y los atletas de fondo y medio fondo van a realizar tres campamentos de tres a cuatro semanas (cada uno), para adaptarse al calor antes de Juegos, por las características de sus pruebas.

-¿Están establecidas las fechas y grupos para estos campamentos?

Cada atleta junto a su entrenador planifica individualmente, pero nosotros recomendamos que los dos primeros campamentos lo realizan en Ecuador, en los centros ubicados en Durán, Carpuela o Ríoverde, que tienen las temperaturas para adaptarse. Para el último, se ha sugerido que se escoja a Europa, en un lugar cercano al huso horario (seis horas de diferencia), puede ser en Barcelona o Italia, faltando poco tiempo de su participación en Juegos Olímpicos, con una duración de un mes –de cuatro a cinco semanas- y lograr esta adaptación.

-¿Los equipos multidisciplinarios acompañarán a los tricolores en Tokio?

De dos a tres equipos multidisciplinarios, equipos médico y sobre todo fisioterapistas de la Secretaría del Deporte van a llegar con los atletas a los Juegos, este acompañamiento está confirmado.

Vamos a tener acceso a la villa olímpica, sobre todo con los deportistas de punta en disciplinas como es la halterofilia, deportes de combate y pruebas de medio fondo, fondo y marcha para que tengan la atención integral para culminar su preparación.

La Secretaría del Deporte invertirá a través del Plan de Alto Rendimiento USD 12’737.070,55, rubro que se divide para eventos (USD 7’041.103,55), equipos multidisciplinarios (USD 1’874.560.78), necesidades (USD 449.869,80) e incentivo económico (USD 3.371.536,42), priorizando de acuerdo a los resultados conseguidos en el ciclo olímpico a deportes como atletismo, boxeo, canotaje, ciclismo, judo, karate, levantamiento de pesas, lucha y natación.

VIS/ SECRETARÍA DEL DEPORTE (24-01-2020)