Son héroes deportivos, ejemplos de vida para muchos y el orgullo de todo un país sobre el ring.

Carlos Quipo y Julio Castillo nacieron en la provincia de Napo y ahí, junto a su gente, el Ministerio del Deporte cumplió un sueño más, casi olímpico a nivel familiar: entregarles su casa propia.

“Este es un incentivo muy grande y nos va a ayudar para seguir trabajando fuerte para hacer quedar bien a Napo y Ecuador”, aseguró Quipo.

Carlos recuerda que con su esposa empezó teniendo nada, su hija Maoly nació hace tres años y no han podido encontrar un lugar fijo para vivir. “Yo era un nómada, vivía en una parte, luego en otra. Ahora rento un departamento pero con esta casa se me quita una preocupación muy grande”.

A sus 23 años, este boxeador olímpico asegura que nunca imaginó tener una casa como la que recibió de manos del Ministro Cevallos y recalcó su nuevo compromiso: “Ahora me dedicaré solo a entrenar y nada más. Mi trabajo es entrenar”.

Tras recorrer su vivienda, Carlos indicó que la próxima semana ya se instalará. “Pongo las cortinas y me paso”, manifestó. ”Estoy muy agradecido con el Ministro y no solo por esta casa porque ya en 2011, cuando él recién entró al Ministerio, vino a Napo y vio que yo ganaba 100 dólares, él cambió eso porque yo ya era un deportista élite, no lo olvido nunca. Espero que siga trabajando como lo está haciendo, que nosotros los deportistas vamos a dar todo de nosotros para hacerlo quedar bien”, sentenció.

La emoción fue igual de intensa para Julio Castillo, quien llegó con su esposa a recibir esta casa a la que calificó como “un detallazo, significa mucho para mí. Es algo emocionante saber que te están apoyando como deportista”.

Para él lo más importante es darle un hogar a su hijo de dos años, ya compró los muebles y solo esperará la visita de su mamá este sábado para dejar el departamento rentado y cambiarse a su nueva vivienda. “Es increíble, yo me comprometo a entrenar fuerte y seguir dando resultados para mi país. Gracias Ministro, que nadie le quite el sueño de trabajar por nosotros. La revolución deportiva ya no es un sueño, se está viendo con hechos”.

Las casas tienen un área de construcción de 146.90 m2 y cuentan con dos plantas, terraza, tres dormitorios, sala, comedor, cocina, dos baños y medio, lavandería, parqueadero cubierto, área verde y guardianía, con una inversión de USD60.000 cada una.

Ambos boxeadores vivirán en el Conjunto Residencial Mediterráneo en Tena, donde hace seis meses su compañero Carlos Góngora también fue beneficiado con una casa. ¿Se soportarán viviendo juntos? “Eso de ley, los que me preocupan son los vecinos”, reveló Julio entre risas.