La selección ecuatoriana de fútbol playa se ubicó en cuarto lugar después de caer en penales 0-1 frente a Argentina, en partido correspondiente a la última jornada de los III Juegos Suramericanos de Playa que se disputan en Vargas, Venezuela.

En el tiempo reglamentario, más el adicional, ambas escuadras igualaron a 7 goles por lado; dejando en evidencia lo intensamente disputado que estuvo el juego, con llegadas peligrosas en ambos arcos. Sin embargo, en la definición final la suerte estuvo al lado de la albiceleste.

Pese a la derrota, en el cuadro que dirige Alcides de Oliveira la figura fue el portero Jorge León, quien evitó la caída de su arco en muchas ocasiones. Un problema físico que tuvo anoche en el juego contra Brasil no le impidió estar hoy; incluso, durante el tercer tiempo jugó lesionado por un fuerte golpe que sufrió en un choque con un delantero argentino.

“Dimos todo lo que teníamos, pero en los penales la suerte acompañó a nuestro rival y lamentablemente nos vamos con las manos vacías”, indicó el guardameta ecuatoriano.

El portero no quiso nunca abandonar la cancha, adujo que por la adrenalina no sintió dolor. Y respondió con creces. A punto estuvo de bloquear el penal que le dio la medalla de bronce a los gauchos, pero fue fuerte el remate que la red fue su destino.

“Las cosas no se dieron acá. Ahora toca virar la página y seguir trabajando fuerte en mi equipo para nuevamente ser tomado en cuenta para defender el arco de la selección”, señaló León.